Manzanillo, Col.- Las lluvias y el fuerte oleaje que trajo el huracán Newton al puerto de Manzanillo afectó a ramaderos de las playas de Miramar y La Boquita quienes perdieron cerca 60 por ciento de sus muebles y sombrillas.
Salvador Zarate, representante de los restauranteros de la playa La Boquita, declaró que “Newton nos tomó por sorpresa y cuando menos pensamos las olas ya se habían llevado sombrillas, mueble y otras mercancías”.
Indicó que esperan a ver si alguna autoridad se acerca para apoyarlos y ver la manera de volver a comprar lo que se perdió.
Indicó que el huracán Newton ya se alejo de las costas manzanillenses y hoy se tienen días soleados en este municipio por lo que esperan que este fin de semana siga el buen clima y tener buena afluencia en esta playa.