Una finca de la calle Santa Rosa, casi esquina con la calle Brasil, en la colonia La Cruz, en Santiago, fue el escenario del segundo suicidio de la Semana Santa y Pascua.
Información extraoficial revela que se trata de un masculino, del que hasta el momento no se han revelado los generales, quien decidió poner fin a su existencia atando una soga a una estructura de una de las habitaciones y el otro extremo se lo amarró al cuello.
Los familiares se percataron de lo ocurrido y de inmediato pidieron apoyo, llegando personal de la Cruz Roja los cuales valoraron al individuo, pero ya nada pudieron hacer.
De los hechos tomó conocimiento el Ministerio Público, que ordenó al Servicio Médico Forense trasladar los restos mortales hasta el anfiteatro de la ciudad.
Todo ocurrió antes de la medianoche y de inmediato la calle fue objeto de una inusual movilización de la DSP.