Manzanillo, Col.- Estas elecciones son históricas para nuestro municipio ya que por primera vez tenemos 6 candidatos que están disputándose la presidencia municipal de Manzanillo, con lo cual se brinda una mayor oferta política para que los ciudadanos escojan a quienes les parezca la mejor opción.
Por un lado tenemos a dos contendiente que cuentan con experiencia y trayectoria amplia en la vida política ocupando diversos cargos de elección popular y que ya tuvieron oportunidad de haber sido alcaldes de Manzanillo, hablamos de Martha Sosa, la candidata del PAN y PRD, y de Virgilio Mendoza, candidato del PVEM y del PRI.
Por otra parte tenemos a empresarios que se han involucrado en la política y con una visión diferente nos referimos a Oscar Urdiales “El Tigre” de Movimiento Ciudadano y Héctor Urióstegui, candidato de PANAL.
Por primera vez contamos con un candidato independiente, Carlos Arellano, que ya hizo historia al ser el primer candidato independiente que participa en busca de la alcaldía de Manzanillo.
Finalmente esta Griselda Martínez, candidata de MORENA. PES y PT, una digna representante de la izquierda, que pese a las adversidades y a la desorganización de esta coalición logró salir vencedora en las encuestas para ser la candidata.
Sin duda hay una gran diversidad en estas elecciones, por lo que hay que evaluar a detalle cada una de las propuestas y decidir quién merece nuestro voto, quién sería el mejor presidente para Manzanillo.
Esto a penas va empezando y esperemos que predominen las propuestas y no las descalificaciones o la guerra sucia que tanto empeñan las elecciones.
Que los apasionamientos no nublen nuestro juicio y que sea una campaña de altura donde los candidatos nos inunden de propuestas reales y realizables, que no exista la confrontación ciudadana desgarrándose hasta la piel por defender a un candidato, que los ciudadanos nos involucremos y que nos informemos, y por supuesto que salgamos a votar, por quién te convenza.
Quien resulte ganador tendrá una gran responsabilidad y un gran reto por la situación que se vive en Manzanillo, no será tarea fácil y los ciudadanos tendremos que involucrarnos para poner nuestro granito de arena pero también para exigir que cumplan con sus promesas.
