Como cada mañana en la 40MNT, se llevó a cabo el Encuentro de Reflexión e Intercambio, que en esta ocasión se centró en el tema del teatro penitenciario.
La mesa redonda titulada El teatro para la libertad, experiencias artísticas a partir de la reclusión contó con la participación del actor y dramaturgo cabaretero César Enríquez y el actor de la Compañía de Teatro Penitenciario, Ismael Corona, quienes relataron sus experiencias en la formación de esta compañía que ya cuenta con 11 años de trayectoria, y a través de la cual incentivan la creación de talleres y compañías de teatro que propicien la reinserción social de los reclusos en diferentes contextos.
Posteriormente, Jorge Correa Fuentes, pionero en el concepto de teatro penitenciario y talleres de reinserción social por medio del arte, relató su experiencia junto con la actriz Rosa Julia Leyva, quien después de haber estado presa por crímenes de narcotráfico en el estado de Guerrero, fundó junto con Correa la sociedad Liberarte, libertad a través del arte, que se dedica a realizar actividades de esta índole en cárceles y en sistemas penitenciarios de la República mexicana.
Durante dicha conferencia, la comunidad teatral tuvo la oportunidad de convivir e intercambiar opiniones sobre el tema con un grupo de estudiantes de la licenciatura en criminología de la Universidad Vizcaya de las Américas.
Por la tarde de este martes 26 de noviembre, cuatro compañías artísticas escenificaron sus trabajos en distintas sedes de la ciudad de Colima. A las 16:30 horas en el Teatro Alfonso Michel, se presentó Me apellido Guerra. Documento escénico sobre la vida de Ana Luisa Guerra, una producción de Bardo Teatro que surge de una investigación acerca de Ana Luisa Guerra, quien formó parte de la Liga Comunista 23 de septiembre.
En palabras de la actriz Juliana Spínola, la obra “es un homenaje a todas las personas desaparecidas en nuestro país. Más que una puesta en escena es un intento de compartir la historia de Ana Luisa Guerra con la intención de sensibilizar a la gente para que sea más consciente y entienda que el tema de las desapariciones forzadas es un problema que involucra a toda una sociedad”.
Los rábanos de don Pantaleón, producción de la compañía colimense ForadoseriO, se escenificó a las 18:00 horas en el Teatro Hidalgo. La obra escrita y dirigida por Augusto Albanez, se desarrolla a través de los personajes tradicionales de la commedia dell´arte italiana, interpretados por Jairo Beltrán, Elisa Albanez, Huitz Valdivia, Iván Quiróz, Tania de la Peña, Raquel Zambrano, Augusto Albanez y Juan Piñón.
Más tarde se presentó Señoras (una obra con mi mamá y sus amigas), en la que la directora Sayuri Navarro involucró a su madre, María Leyva, y las amigas de ésta, Irma Téllez y Josefina Rivera, para interpretar en escena los relatos que son un reflejo de personajes de la vida cotidiana. Señoras (una obra con mi mamá y sus amigas), producción de la compañía Monos Teatro, se escenificó con gran éxito a las 19:00 horas en el Cedart Juan Rulfo.
Para cerrar la jornada, a las 21:30 horas en el Foro Pablo Silva García, Las hijas del Aztlán, dio muestra del trabajo de la Compañía de Teatro Penitenciario de la Ciudad de México. Este espectáculo de cabaret interpretado por Javier Cruz, Antonio Hernández e Ismael Corona, ex-internos del penal de Santa Martha Acatitla, y por el actor Luis Montalvo y la actriz Valeria Lemus, muestra cuan ridículo y absurdo es el patriarcado rampante que nos rige, nos violenta y hace de nuestro destino una auténtica tragedia mexicana.