Sara Valdovinos, regidora en Manzanillo, alzó la voz ante la crítica situación que atraviesa el puerto más importante de Latinoamérica. Según la funcionaria, el puerto de Manzanillo se encuentra completamente colapsado debido a una administración deficiente y una total falta de planeación. Más de 4 mil camiones intentan ingresar diariamente, enfrentando tiempos de espera que superan las 24 horas tanto para entrar como para operar dentro del recinto. Las condiciones son tan precarias que varios operadores han tenido que ser trasladados en ambulancia, ya que no existen instalaciones adecuadas, ni servicios básicos como baños, comida o agua. “Esto no es por el clima ni por accidentes, es el resultado de malas decisiones”, aseguró.
Valdovinos cuestionó severamente la inacción de las autoridades de los tres niveles de gobierno, así como la falta de coordinación de las operadoras portuarias y de la Asipona. “¿Dónde está la Marina, el gobierno del estado, el gobierno federal y el ayuntamiento?”, preguntó, al denunciar que la crisis también ha afectado gravemente a comunidades como Jalipa y Pancho Villa, donde los habitantes no pueden salir de sus casas por el caos vial. La regidora exigió respuestas y soluciones inmediatas: “No es justo ni digno, Manzanillo no puede seguir cargando con los errores de unos cuantos. Este puerto es vital para la economía nacional, pero quienes toman decisiones ni conocen la ciudad ni a su gente”.