Al señalar que se ha demostrado que el virus de papiloma humano causa el 99 % de los casos de cáncer del cuello de la matriz, la Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado dijo que las mujeres que inician relaciones sexuales antes de los 18 años y las que tienen un mayor número de compañeros sexuales corren un mayor riesgo de contraer el VPH y desarrollar lesiones que en el futuro pudieran evolucionar a esta patología.
En el marco de la campaña de sensibilización de cáncer cérvico-uterino “Más cerca de lo que parece”, que comenzó este lunes 10 de agosto, la dependencia indicó que la mayoría de los hombres y mujeres sexualmente activos se contagian del VPH al menos una vez a lo largo de la vida y por lo general no presentan síntomas, aun cuando el mayor riesgo es para las mujeres con el citado comportamiento sexual.
Otros factores de riesgo que pueden llevar a padecer el cáncer cérvico-uterino son la infección por virus del papiloma humano; mujeres de 25 a 64 años de edad; antecedentes de haber padecido enfermedades de transmisión sexual; tabaquismo; desnutrición; deficiencia de antioxidantes; pacientes con inmunodeficiencias, y nunca haberse practicado el estudio citológico (papanicolau).
Durante la mayor parte del tiempo, el cáncer cérvico-uterino inicial es asintomático. Sin embargo, los primeros síntomas que se pueden presentar abarcan el sangrado vaginal anormal entre periodos, después de la relación sexual o después de la menopausia; el flujo vaginal que no cesa, que puede ser pálido, acuoso, rosado, marrón, con sangre o de olor fétido, y los periodos menstruales que se vuelven más abundantes y que duran más de lo normal.
La dependencia indicó que el cáncer en el cuello de la matriz, segunda causa de muerte por tumor maligno en mujeres de 25 y más años de edad, es una enfermedad prevenible casi en un 100 % si se detecta y tratan sus lesiones precursoras, y es también curable cuando se detecta en etapas tempranas.
Al respecto, agregó que el tratamiento depende de la etapa o estadío del cáncer; el tamaño del tumor; la edad y salud general de la mujer, y su deseo de tener hijos en el futuro.
El cáncer en etapa temprana se puede curar con la extirpación o destrucción de los tejidos precancerosos o cancerosos, existiendo diversas formas quirúrgicas de hacer esto sin extirpar el útero ni dañar el cuello uterino, de tal manera que la mujer pueda aún tener hijos en el futuro.