En lo que va de la presente administración han muerto dos policías municipales en hechos vinculados con el crimen organizado, además de otros atentados contra elementos de la policía cuando viajaban en patrullas o incluso como en El Colomo, cuando sicarios llegaron a quitarles las armas hasta las oficinas de la delegación.
El último de los casos es el policía Julio Cesar Rey García, quien había salido del turno laboral y caminaba rumbo a su casa el pasado sábado, siendo alcanzado por sicarios en la calle “Vasum” de la colonia Marimar y desde una camioneta le dispararon; fuer trasladado al hospital y falleció más tarde; este lunes le darán cristiana sepultura.
Este policía se encontraba el pasado jueves en la patrulla que fue baleada por la carretera a Jalipa.
Sobre este hecho violento en donde un elemento de la dirección de seguridad pública, no existió comunicado oficial por parte de la autoridad municipal, ni siquiera condolencias a la familia por lo sucedido.
Fue la red nacional de asociaciones policiales y la asociación de policías del estado de Colima, quienes hicieron un pronunciamientos para exigir que se permita a los policías portar armas camino a su casa, ya que son varios policías en la entidad que son asesinados cuando van del trabajo a su casa.
Otro policía muerto en esta administración fue Edgar Flores Ursino, quien murió el 8 de febrero luego de que en una persecución a sicarios el 24 de enero pasado cayó de la patrulla y murió tras días en el hospital.
En la pasada administración fueron asesinados cinco policías municipales durante los 3 años