En seguimiento a las alertas sanitarias que ha emitido la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), la Secretaría de Salud y Bienestar Social, llevó a cabo un operativo para la búsqueda y aseguramiento de cigarros ilegales y productos similares, que han sido identificados en el mercado como cigarros electrónicos, vapeadores, e-cigarretes, cigarro sin humo, piezas de repuestos y otros insumos.
Durante este operativo, la Coespris informa que se realizaron 15 visitas para búsqueda de dichos productos, 16 verificaciones sanitarias y 8 aseguramientos, reteniendo 430 productos, entre ellos cigarros electrónicos, pipas, vaporizadores o vapeadores, líquidos para vaporizar y diversas piezas de repuesto de los equipos (boquilla, baterías, filtros, atomizadores y resistencias).
Lo anterior, al incumplir con la legislación sanitaria vigente, particularmente con la fracción VI del artículo 16 de la Ley General para el Control del Tabaco, misma que prohíbe “comerciar, vender, distribuir, exhibir, promocionar o producir cualquier objeto que no sea un producto del tabaco que contenga alguno de los elementos de la marca o cualquier tipo de diseño o señal auditiva que lo identifique con productos del tabaco”.
De esta manera, se evita el consumo de cigarros falsificados, adulterados o elaborados con ingredientes desconocidos que contienen químicos potencialmente tóxicos y distintos a la planta del tabaco, lo que impide identificar el comportamiento de dichas sustancias en el organismo.
Asimismo, se impide el consumo de productos que son atractivos para adolescentes y menores de edad al contar con variedad de sabores, porque emiten menor cantidad de humo y provocan menor olor, e incluso porque algunos indican que no contienen nicotina, lo que presume que no provoca adicción.
La Secretaría de Salud puntualiza que la Coespris seguirá realizando estas acciones de vigilancia sanitaria, ya que en el estado se ha encontrado que establecimientos que venden artículos electrónicos y de telefonía en diversos locales y plazas comerciales comercializan los citados productos.
Además, ha detectado en redes sociales mensajes publicitarios y comercialización de estos artículos como alternativa para dejar de fumar o incluso fumar con efectos menos agresivos a la salud de las personas, situación que carece de respaldo científico de la Autoridad Sanitaria en el país