Ciudad Juárez.-Por cuatro minutos, alrededor de 3 mil personas de 250 distintas familias pudieron abrazarse ayer e intercambiar algunas palabras en la frontera entre Anapra, México, y Sunland Park, Estados Unidos.
La actividad que celebra su sexta edición es promovida por la Red Fronteriza por los Derechos Humanos y fue supervisada por la Patrulla Fronteriza.
“La familia fronteriza es una familia que debe estar unida, que no debe estar separada, porque ese es el correcto modo de vivir. Somos una familia dividida por una línea política que hoy se está rompiendo”, resumió José Márquez, representante del Movimiento Migrante Mesoamericano.
Antes de abrir una reja para que durante escasos cuatro minutos las familias pudieran convivir unidas, cuatro oradores de la organización, emitieron un mensaje exaltando la unidad y las cualidades de quienes han tenido que dejar su territorio natal.
“Hoy estamos dando el ejemplo a nivel mundial de que se puede tener la esperanza conjunta de la unidad de las naciones”, dijo Manuel Miranda.
Comúnmente el evento era realizado en el Río Bravo, cerca de la parte inferior del puente internacional Paso del Norte, pero ante la extensión del muro fronterizo, está ocasión no pudo realizarse ahí.
